Un obispo de Tenerife justifica abusos a menores, y culpa la homosexualidad

Bernardo Álvarez, obispo de Tenerife, ha declarado que el abuso de menores, está consentido por éstos, "Puede haber menores que sí lo consientan y, de hecho, los hay. Hay adolescentes de 13 años que son menores y están perfectamente de acuerdo y, además, deseándolo. Incluso si te descuidas te provocan." dijo.

Además, dijo: "Pero, lógicamente, creo que el fenómeno de la homosexualidad es algo que perjudica a las personas y a la sociedad. A la larga pagaremos las consecuencias como las han pagado otras civilizaciones. Yo no digo que se reprima, pero entre no reprimirlo y promoverlo hay un margen."



Fuentes: http://www.laopinion.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2996_9_120211__Sociedad-homosexualidad-perjudica-personas-sociedad
http://www.elmundo.es/elmundo/2007/12/27/espana/1198760752.html?a=98e57864fb47999a48f25ef228311419&t=1198768497

Aquel que se sorprenda por estas declaraciones, ya está ciego, porque esto no es nuevo.
Este ideal, junto con muchos otros, que son totalmente descerebrados, están dentro de la ideología católica, y siempre han estado. A este obispo, se le han mezclado su deficiencia mental, con lo que se le ha inculcado desde la moral e ideología católica.

La Iglesia, ademas de muchas otras cosas, destruye al hombre, y lo enfrenta, en su totalidad.
La moral católica es el estigma del mal, y negar a Dios será la única forma de salvar el mundo.

Las religiones siempre han existido, sí, pero por la falta de conocimiento del universo que había hace 2000 años. Hoy día, pensar en la existencia de Dios, no es mas que un mal extendido por todo el mundo. Es una revelacion de falta de autonomía propia, y un claro manifiesto de debilidad por parte de la persona creyente, puesto que al creer en Dios, y su Reino anunciado, no afronta ni asimila que va a morir, y no sabe vivir la vida, y por ello cree en eso. Además hace a Dios a imagen y semejanza, y lo hace bueno, comprensivo, y sabio, es decir, todo aquello como no se ve a sí mismo el creyente.

Los creyentes son personas débiles, y compasivas, y la compasión, es la manifestación de la culpa, una culpa que si se siente, es porque sabes que has hecho algo mal.


Otras noticias relacionadas:
Un sacerdote se acostaba con sus hijas para "enseñarles a serbuenas esposas"
"Siete sacerdotes abusaron de mí durante cuatro años hasta dejarme embarazada"